Incorporar las mejores prácticas a la vida empresarial y dar a conocer las que ya se tienen en marcha es la mejor solución que puede adoptar una compañía para responder ante una sociedad que observa detenidamente cada uno de los pasos que da. Tras la crisis global, la falta de confianza es uno de los principales problemas a los que empresas e instituciones tienen que enfrentarse. Para recuperarla, no solo hay que ser más transparentes sino también desarrollar buenas prácticas en la relación con los clientes, empleados, accionistas, medios de comunicación… Es decir, con toda la sociedad en general.
En este sentido, MAPFRE ha puesto en marcha su Plan de Transparencia Activa con el objetivo de aumentar la accesibilidad de la compañía y mejorar su comprensión, es decir, lograr que la transparencia sea un activo reconocible de la empresa. El piloto de este plan nace en España de la mano de Antonio Huertas, presidente de MAPFRE, y María Luisa Gordillo, subdirectora general de Coordinación Contable, es la responsable de liderar esta iniciativa que, tras una primera fase, tomará un carácter global y se extenderá al resto de países donde MAPFRE tiene presencia. Leer más