Preparar un viaje es todo un arte, y más cuando tenemos pocos días antes de las vacaciones. Como ya contamos anteriormente, preparar las maletas, dejar la casa lista y segura, organizar los vuelos o los desplazamientos en general, el itinerario o el qué vamos a hacer en el destino ocupan nuestra mente al 100%.
Pero hay algo que a veces dejamos de lado y que es muy importante: ¿qué pasa si tenemos que cancelar el viaje en el último momento? ¿Y si caemos enfermos en el destino? ¿Y si nos apetece practicar un deporte de riesgo? Para estar bien cubiertos en el momento de viajar, o mientras estamos en nuestro destino disfrutando a tope, conviene estar bien informados acerca de los tipos de seguros de viaje, y sus coberturas.
Seguros para viajes de todo tipo
La respuesta más positiva para todas las preguntas anteriores es sencilla: existen seguros para viajes de todo tipo, que cubren las situaciones más atípicas y que nos protegen en el peor de los casos. Cancelar un viaje en el último momento no solo es un fastidio por perdernos esas vacaciones, si no puede suponer una pérdida de dinero importante, si no cumplimos ciertas condiciones para poder recuperar lo pagado.
El seguro de cancelación de viaje es tanto más interesante cuanto más anticipada sea la compra del viaje, pues incrementamos la posibilidad de tener que cancelar en el último momento. En un viaje de «último minuto» es más difíciel que nos suceda eso.
Igualmente, visitar un país lejano y con ciertas restricciones en cuanto a la Sanidad nos hace pensar que un buen seguro médico para el viaje es buena idea. En EE.UU., por ejemplo, lo tenemos complicado en el caso de caer enfermos o tener un percance porque la sanidad es muy cara. En la Unión Europea no es necesario, en la mayor parte de los casos, porque nos sirve la Tarjeta Sanitaria Europea.
Otro tipo de seguros interesante es el que nos cubre en viajes temporales, es decir, viajes de corta duración (como por ejemplo, para una adopción); los seguros para viajes de estudios, en los que vamos a aprender idiomas, viajes de verano, etc.; los seguros para viajes cortos, campamentos, jornadas culturales, viajes de la tercera edad…
Como vemos, la oferta de seguros de viaje es muy amplia. Incluso, si decidimos hacer algún viaje para practicar deportes, como el esquí o el snowboard, es posible contratar un seguro específico para ir a cualquier estación del mundo con la máxima tranquilidad; o si preferimos el golf, pues podremos jugar con la seguridad de que todo nuestro equipo esté asegurado; si el deporte por el que nos decantamos es la caza o nos gusta ir de safari, también tendremos un seguro a medida al alcance, y si lo que nos gusta son los deportes de aventura al aire libre, no tenemos excusas.
Es posible que pienses que contratar un seguro para irte de viaje… encarece el viaje. Sin embargo, pagar la pequeña cantidad que supone ese seguro te permite viajar tranquilo, sabiendo que estás perfectamente cubierto ante cualquier imprevisto. ¿No vale la pena pasar las vacaciones tranquilos, sin pensar en otra cosa que en disfrutar?
Una respuesta a Si viajas en vacaciones, no olvides cubrirte las espaldas