El futuro cercano pasa por un incremento masivo de la población que vivirá en los grandes centros urbanos, porque se estima que hacia el año 2030, el 60% de la población mundial vivirá en grandes ciudades, y para 2050 el porcentaje se eleva al 70%. Muchas de las grandes ciudades se convertirán en ‘megaciudades’, y cada vez será más necesario incluir sistemas de control y algo de inteligencia gracias al Internet de las Cosas.
El camino para llegar a enormes ciudades bien organizadas, sostenibles y con un consumo energético controlado, pasa porque se conviertan en Smart Cities, es decir, una ciudad eficiente con sus recursos y sostenible en todos los aspectos, en la que existirán miles de dispositivos conectados útiles, es decir, que nos den algún servicio valioso.