Cuando presencies o estés implicado en un accidente de tráfico, tanto si vas en coche como a pie, debes detenerte en cuanto puedas, con cuidado de no provocar ningún percance en la circulación y manteniendo la calma. Para informar de la posición y las circunstancias después de proteger la zona y a ti mismo de peligros, se debe llamar a los servicios de emergencias 112, un número que funciona en toda Europa y es gratuito (desde las cabinas públicas también, sin necesidad de monedas). Después de todo esto, toca auxiliar a las personas intentando no destruir pruebas.
Si te ves obligado a parar con tu coche, no olvides encender las luces emergencia incluso de día, y las de posición si está amaneciendo o atardeciendo o en malas condiciones meteorológicas. Muy importante también: delimitar la zona de peligro con los dispositivos para ello a 50 metros de distancia, “uno por delante y otro por detrás del vehículo o la carga, excepto en calzadas de sentido único o de más de tres carriles en las que será suficiente con el de la parte posterior”, explica la DGT en un manual sobre primeros auxilios. Leer más