A caballo entre la empresa y el cliente, el suscriptor es una persona que analiza minuciosamente los riesgos tanto de uno como de otro. Además, cuando vas a contratar un seguro diseña las condiciones (garantía, tarificación de las primas…) de este en función de las necesidades del contratante a la vez que resulta competitivo (y de él depende que te lo concedan).
Es una figura fundamental también porque se encarga de supervisar las condiciones de los riesgos deficitarios y ajustar los productos a la demanda del mercado.
Los suscriptores velan por los intereses tanto del asegurado como del asegurador, buscando siempre la máxima rentabilidad del negocio, así que su misión es encontrar ese punto en el que se cubren las necesidades del cliente y los números de la cartera son positivos. Por ejemplo, si su estimación se queda corta la empresa puede perder dinero al realizar los pagos; y si el seguro es demasiado elevado, probablemente perderá clientes.
Normalmente, el suscriptor se especializa en los distintos tipos de ramos: transporte, responsabilidad civil, etc. La nuevas tecnologías han facilitado mucho la labor de los suscriptores, ya que ayudan a calcular el riesgo y la posibilidad de pérdida financiera.
«El área de suscripción debe interactuar con otras áreas de la compañía como actuaria, indemnizaciones, comercial, administración, tecnología, etc., lo que hace que se tengan en cuenta todos los aspectos que intervienen en un ramo», según explica Javier Alfredo Forero Bonilla, del área de Suscripción de Automóviles en Mapfre Colombia en la revista El Mundo de Mapfre, en un artículo en el que varios suscriptores cuentan su experiencia a la hora de desempeñar este trabajo.
12 respuestas a ¿Sabes qué es un suscriptor de seguros?