El enemigo número uno de la actividad de agricultores y ganaderos son los fenómenos atmosféricos, como el viento y la lluvia, por los destrozos que pueden ocasionar o las inundaciones, y los daños eléctricos. Los seguros agropecuarios están precisamente para proteger de esos riesgos o cualquier otro que se produzca en la naturaleza, pero abarcan mucho más.
Estos seguros también ofrecen protección antes riesgos biológicos, como plagas o enfermedades, siempre que se trate de riesgos ajenos al control del tomador, asegurado o beneficiario. Y no solo se orientan a las instalaciones y terrenos, sino también a los propios trabajadores y al propietario ante posibles accidentes, invalidez, enfermedades… Al englobar muchas y muy variadas actividades, los seguros agropecuarios se adaptan a cada productor agropecuario en función de sus necesidades.
En MAPFRE contamos con un seguro agropecuario multirriesgos que, además de cubrir los riesgos más habituales, ofrece otras coberturas ajustadas a cada explotación agropecuarias en lo que se refiere a las instalaciones, el ganado, los equipos de riego y, por supuesto, la maquinaria agrícola y vehículos específicos para realizar la actividad. Concretamente, ofrecemos pólizas destinadas a proteger explotaciones agrarias, invernaderos, ganado, bodegas y almazaras.
Es más, con el seguro multirriesgo de MAPFRE es posible asegurar a la vez la vivienda del productor agropecuario cuando esta se encuentre en el mismo recinto de las instalaciones, con las mismas ventajas que cualquiera de los seguros de hogar (robo, incendio, responsabilidad civil, daños por agua, roturas de cristales, daños estéticos, asistencia en el hogar, asistencia en viaje, joyas y defensa jurídica), incluso si se quiere con las coberturas más novedosas, como la asistencia informática, protección digital, asistencia telefónica las 24 horas, asistencia urgente (servicio de vigilancia, rescate de personas…) y transporte de animales vivos, entre otras.
España cuenta con una superficie agraria útil de más de 23 millones de hectáreas, casi la mitad del territorio español, de las cuales casi 17 millones de hectáreas son de cultivo. En cuanto a ganadería, existen más de 25 millones de cabezas de ganado porcino y más de 16 millones de ganado ovino. La economía española generada por la actividad agrícola, ganadera y pesquera supone un 2,5% del PIB (dato de 2015), según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Foto: Ramon de cal Benido