La osteoporosis es una enfermedad ósea que se caracteriza por una alteración de la microarquitectura del hueso, lo que conlleva una disminución de su resistencia, mayor fragilidad y por tanto, mayor riesgo de fractura.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la osteoporosis afecta a un 30% de mujeres y a un 8% de hombres mayores de 50 años pero estos datos varían de un país a otro debido a los distintos tipos de alimentación y estilo de vida, factores determinantes en la aparición de esta enfermedad.
La masa ósea es la cantidad de hueso que posee una persona y es en los dos primeros años de vida y durante la adolescencia cuando más masa se gana, llegando al pico máximo entre los 20 y los 35 años. A partir de ese momento empieza una reducción gradual. En el caso de las mujeres, la disminución se acelera al llegar a la menopausia y en los hombres la pérdida es más progresiva pero constante a lo largo de toda la vida.
Principales síntomas y diagnóstico
La osteoporosis es una enfermedad silente, es decir, solo duele cuando ya existe fractura. Las fracturas más frecuentes son las fractura de muñeca, la vertebral y la de cadera que, debido a sus frecuentes complicaciones asociadas, en ocasiones tiene un desenlace fatal.
El diagnóstico de la osteoporosis se realiza fundamentalmente por la densitometría, una prueba que da una idea de la estructura del hueso y que suele usarse como un primer cribado para descartar si se da o no la enfermedad en el paciente.
Pilares básicos para prevenir la osteoporosis
El 70% de nuestra masa ósea viene definida por nuestra herencia, de ahí que sea muy importante conocer el historial de fracturas en nuestra familia a la hora de luchar contra esta enfermedad.
Sin embargo, hay que prestar especial atención a otros factores de riesgo que contribuyen a su aparición como la inmovilidad, el sedentarismo, el tabaco, el alcohol, la mala alimentación o ciertas medicaciones, entre otros. En definitiva, la osteoporosis se puede prevenir con hábitos de vida saludables como:
– Llevando una dieta rica en calcio (presente en lácteos, algunas verduras, sardinas…), vitamina K (presente en verduras de hoja verde), vitamina C (cítricos), magnesio (frutos secos).
– Para la correcta absorción del calcio es necesaria la Vitamina D, pero se encuentra en los alimentos en mucha menos proporción que otras vitaminas. El mayor productor de vitamina D es nuestro propio organismo y para generarla basta con recibir las radiaciones solares entre 10 y 20 minutos diariamente (no es necesario tomar el sol de forma estática durante este tiempo sino que, por ejemplo, se puede caminar al aire libre).
– Practicando ejercicio de forma constante y progresiva, con una duración de unos 15- 60 minutos, dos o tres veces por semana. Las actividades deportivas más indicadas para prevenir esta enfermedad son: baile, aerobic, taichí y, sobre todo, caminar.
– Eliminando hábitos nocivos como la ingesta de alcohol y tabaco, así como evitar ciertas situaciones que favorezcan las caídas y sus consiguientes fracturas.
Una respuesta a ¿Qué es la osteoporosis y cómo podemos prevenir su aparición?