Si dispones de un pequeño negocio online, almacenar los productos cuesta dinero, ya que se requiere de un espacio, normalmente una nave, para guardarlos en stock. En estos casos de venta al por menor, la alternativa para ahorrarse los gastos de almacenaje es el dropshipping.
Este modelo de negocio se basa en el envío directo del proveedor al cliente. Es decir, el pedido nunca pasa por las manos de la tienda online, sino que va directamente del que lo fabrica o suministra al que lo compra. La dinámica es la siguiente: el usuario compra en tu web el producto y tú con el abono del producto se lo pagas al proveedor y este lo envía directamente al comprador.
Esto facilita mucho el inicio de un comercio por internet. Y no solo por esa ventaja de que no necesitas almacén. También porque te libera de toda la dinámica de envíos y entregas. Es decir, que te deja tiempo para otras cosas.
Sin embargo, también presenta algunas desventajas. Una de ellas a tener muy en cuenta: los márgenes de beneficio resultan muy bajos como intermediario. Con el inconveniente de que otros muchos comercios minoristas pueden ser proveedores de ese mismo producto.
Estas son algunas de las pautas que debes seguir para aplicarlo en tu negocio:
-Asegúrate de que el proveedor es de confianza. Que sepas que te va a responder porque el que da la cara ante el cliente eres tú y a ti se va a dirigir en caso de reclamación. Bucea en busca de información para comprobar que no te va a fallar a la hora de cumplir con los pedidos.
-Para que todo quede muy claro con el proveedor, incluye una cláusula en el contrato en la que queden recogidos los plazos de entrega de los pedidos.
–Negocia todas las condiciones con el proveedor sin que quede ningún fleco. Por ejemplo, para ofrecer descuentos en el caso de la venta en grandes cantidades.
-La transparencia en cualquier negocio siempre es un punto a favor. Incluye algún apartado en la tienda online en la que informes de los detalles de la compra-venta, como que tú eres un intermediario nada más, que ni siquiera te encargas de enviar el producto. Así estarás protegido antes posibles incidencias.
Foto: Gerard Romans Camps