Los expertos recomiendan que los menores no dispongan de ordenador, consola o televisión en su habitación. Es una medida que facilita a los padres la supervisión de los contenidos que consumen. Pero si están mucho tiempo solos, una buena alternativa son los controles parentales vía software de los propios dispositivos u otros que se pueden instalar.
Cada sistema operativo cuenta con un programa de control. Para activarlo en Windows 10 tienes que ir a configuración de Windows/cuentas/familia y otras personas/agregar familiar/agregar menor. A partir de ahí, y para que el pequeño arranque Windows con su propia cuenta, indicas una dirección de email del niño (debe ser de Microsoft, si no la tuviera te indica cómo abrir una en Outlook). Así, creas tantas cuentas para menores como quieras.
Para evitar que acceda a otras cuentas distintas de la suya, asigna a cada una un PIN para que cada hijo entre con la suya. Para ello, entra en configuración de Windows/cuentas/opciones de Inicio de sesión.
Una vez creadas las cuentas, ahora toca configurarlas. Puedes hacerlo a través de esta página web. Desde ahí puedes establecer límites de tiempo frente a la pantalla, bloquear sitios web inadecuados, o activar un aviso para que el menor solicite permiso a los padres antes de comprar contenido en Microsoft Store, entre otras limitaciones, según explican en la web.
Al iniciar sesión (con la cuenta del progenitor), desde el apartado “Actividad” es posible consultar los programas que utiliza el niño, las webs que visita y las búsquedas que realiza. Si quieres, puedes configurarlo para que te envíe informes semanales. En la opción “Exploración web”, bloqueas contenidos. Y en “Tiempo frente a la pantalla”, eliges el tramo horario y los días de la semana en los que puede utilizar el ordenador o la consola Xbox.
Si lo que quieres es controlar el uso de un móvil Android, existen varias posibilidades. Una muy completa es utilizar la propia app de Google, llamada Family Link. Con ella es posible administrar las apps que utilizan los menores, saber cuánto tiempo utilizan una de ellas, establecer límites en el horario de uso, bloquear el teléfono para que no se distraigan mientras hacen los deberes o cuando se van a la cama, restringir el acceso a contenidos para adultos en Google Play o, incluso, verificar la ubicación de su teléfono.
En las últimas versiones de Android, también es posible crear múltiples cuentas para diferentes usuarios. Así cada uno dispone de su propio entorno. Cada miembro de la familia entra con su PIN y esto impide que los menores accedan a la cuenta del adulto. Configuras esta opción desde Ajustes/Usuarios y cuentas/Usuarios/Añadir usuario. Esto también es posible desde la pantalla principal, abres el menú desde la esquina superior derecha, vas a ajustes/usuarios (o pulsas sobre el icono de usuarios) y le das añadir usuario.
Además de estas herramientas, otra alternativa es descargar una app específica para el control parental. Existen muchas, por ejemplo, Qustodio, YouTube Kids, Kids Place o Teen Safe.
Foto: Manuel m. v.
Una respuesta a Claves para configurar el control parental en Windows y Android